Voto Concepcionista
Apéndice III
Formula de la protesta de Fe y renovación del Voto
En el nombre de Dios Todopoderoso, Padre, Hijo y Espíritu Santo; en el de Dios Hijo hecho Hombre, nuestro Redentor y Señor Jesucristo, a quien adoramos real y verdaderamente presente en el Augusto Sacramento de la Eucaristía; en presencia de todos los circunstantes que nos escuchan y a la faz de todo el mundo.
Nosotros, el Hermano Mayor, Consiliarios y demás Oficiales y hermanos de Primitiva Hermandad de los Nazarenos de Carmona, Cofradía Pontificia y Real de Nuestro Padre Jesús Nazareno, Santa Cruz En Jerusalén, María Santísima de los Dolores y Divina Pastora de las Almas, decimos y proclamamos que creemos en Dios, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra; creemos en Jesucristo, su único Hijo, nuestro Señor, que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo, nació de Santa María Virgen, padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue crucificado, muerto y sepultado, descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de entre los muertos, subió a los cielos y está sentado a la derecha de Dios, Padre Todopoderoso; desde allí ha de venir a juzgar a vivos y muertos; creemos en el Espíritu Santo, la Santa Iglesia Católica, la comunión de los santos, el perdón de los pecados, la resurrección de la carne y vida eterna. Amén.
También como sucesores de aquellos antiguos nazarenos que fueron los primeros que se obligaron con voto y juramento a creer, confesar y defender que la Santísima Virgen Madre de Dios, pro un privilegio especial del Altísimo, atendiendo a los meritos previstos de su Hijo Nuestro Señor Jesucristo, fue preservada de la culpa original que todos contraemos al nacer, declaramos que como católicos, apostólicos y romanos creemos en todos los misterios que Nuestra Madre la Iglesia nos propone, muy especialmente en este de la Inmaculada Concepción de la Santísima Virgen María.
Y para que no se pierda, antes bien se aumente y propague el afecto y devoción entre los presentes y nuestros sucesores a tan augusto Misterio, hemos acordado hacer todos los años en el día de la fiesta principal de Instituto a la Santa Cruz esta publica y solemne manifestación, y no admitir en nuestra Cofradía a quien antes no la hiciere.
Hacemos asimismo solemne voto y juramento de creer, confesar y defender hasta la muerte los misterios de la Mediación Universal de la Santísima Virgen en la dispensación de todas las gracias, y de su Realeza Universal como Madre de Dios y Corredentora del género humano, renovando la consagración solemne de esta Cofradía al Corazón Inmaculado de la Virgen Purísima en perpetua y total entrega de amorosa y filial servidumbre.
Señor Jesús Nazareno: acepta esta Renovación de Fe de nuestra Hermandad en esta Fiesta de la Santa Cruz, para que cada vez seamos más conscientes de nuestra condición de cristianos y para que la Hermandad se reafirme más y más en la roca de tu Verdad. AMÉN.